Nuestro momento se destaca de otros, por el constante y rápido cambios en nuestras conductas sociales. Hoy en día se habla abiertamente del bullying, de temas de género, inclusión, acoso, etc. Temas que, no hace muchos años, no eran “aptos”, valían la pena abordar o quizá no exigían mencionarlos, cuando en realidad, siempre han exigido su reflexión.
El etiquetar sin pensar
En concreto, existe un término denominado “Los recha”, utilizado (principalmente),en el segmento de jóvenes de educación media superior.
Los “recha”, hace mención a cierto perfil del grupo social que es rechazado y por lo tanto, etiquetado así en su intención por formar parte de algún núcleo social. Un término, por mucho, dotado de total agresividad y que por supuesto no es nada nuevo, ya que solamente renueva en su denominación absurda, a un sentido de ataque y rechazo impuesto por los agentes motivadores y accionarios del bullying.
¿Qué futuro tienen?
Si eres alguien que utiliza este tipo de adjetivos, evítalo al máximo, porque lo único que demuestras llamando a alguien así, es tu propia imposibilidad para desenvolverte en armonía. En desear destacar ante los demás, mostrando agresividad, poco criterio y limitada inteligencia.
Es verdad que en ciertas etapas de la vida nos encontramos buscándonos o buscando respuestas (¿quién no?), en ese proceso que exige separarnos del grupo, pero en ese y otras etapas, nadie es “recha”, simplemente se está tratando de sobrevivir en un mundo complicado y dando prioridad a un orden de ideas que florecerán en un ambiente de armonía y respeto por nuestros conciudadanos.