De acuerdo con el informe de actualización de los derechos humanos en Venezuela, Michelle Bachelet, la Alta Comisionada de la ONU, expresó sentirse sumamente preocupada por la crisis, así como por la postura de las autoridades que se niegan a reconocer las dimensiones de lo que califica como una “vasta crisis humanitaria”.
Al presentar el informe ante el Consejo de Derechos Humanos, Bachelet indicó que la situación ha afectado más los niños, ancianos y mujeres embarazadas, así como a los pueblos indígenas que se han visto gravemente afectados en la búsqueda de alimento, atención médica y servicios básicos.
La reciente interrupción de energía eléctrica ha afectado todo el país, mismo que reduce el acceso a la población a los alimentos, agua y medicamentos, creando un grave problema en los servicios de salud.
Por otro lado, la escasez de servicios, transporte público y la hiperinflación, genera atroces condiciones económicas, así mismo la atención sanitaria continúa deteriorándose, lo que genera una altas consecuencias en la mortalidad, morbilidad materna y mortalidad infantil.
La preocupación se incrementa debido a las sanciones sobre transferencias financieras derivadas de la venta del petróleo venezolano en Estados Unidos, lo que empeoraría aún mas la situación económica.
Otra de las situaciones que han afectado los derechos humanos en Venezuela, son las represalias e intimidación de las fuerzas del orden del gobierno de Nicolás Maduro, junto con el aumento de las restricciones a la libertad de expresión y de prensa en Venezuela.
Se necesita un acuerdo sobre una solución política para mejorar varios problemas urgentes de #DerechosHumanos en el país, señaló hoy la Alta Comisionada @mbachelet en su actualización al Consejo de #DDHH – @UN_HRC
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— ONU Derechos Humanos (@ONU_derechos) 20 de marzo de 2019
Michelle Bachelet, indicó que la crisis que se vive en Venezuela, cuenta con un aspecto positivo, ya que otros países han mostrado su apoyo, al recibir miles de ciudadanos con necesidades humanitarias urgentes.
Bachelet, celebró los esfuerzos que han realizado los países receptores de la región para abordar las necesidades de los refugiados y migrantes.
La Alta Comisionada, afirmó que que es preciso que se alcance un acuerdo sobre una solución política para todos los interesados, con medidas para mejorar una amplia gama de problemas de suma importancia de derechos humanos.
